miércoles, 31 de octubre de 2007

Los Serrano - Loquendo



Gracias a quien aumentó mis conocimientos de informática para que este vídeo esté aquí xD



lunes, 15 de octubre de 2007

El anuncio




He aquí el vídeo del anuncio de Supermercados Gadis que ha revolucionado a Galicia entera.
He leído por algún foro que es una copia de un anuncio argentino (que no he visto) y también hay uno sobre Quebec que es similar, aunque yo no hablaría de plagio porque representan culturas diferentes y cada uno exalta la suya propia. Quizás es precisamente por describir muchas de las cosas que nos identifican a los gallegos por lo que ha causado tanto furor, además de tener una ironía y un humor especiales, como todo gallego que se precie :)

En realidad hay un par de cosas en las que no estoy de acuerdo, pero prefiero que vosotros lo veáis y comentéis primero, a ver que os parece, porque esos fallos que yo le encuentro son por "deformación profesional" más que nada y que a lo mejor no son tan importantes. Vosotros diréis. Y ahora vienen las preguntas:

· Para los que sois gallegos: ¿os sentís identificados con todo lo que dice el anuncio? ¿Os véis reflejados en todas las afirmaciones que contiene?
· Y los que sois de fuera de Galicia: ¿es esa la idea que teneis de los gallegos? ¿Entendeis completamente todas las referencias que se presentan (porque todo tiene un fuerte contenido cultural)? Y por último: ¿qué significa riquiño?

Pues bien, para los lectores foráneos y/o no versados en lengua gallega, pongo la traducción al castellano que está en Youtube.


Opinad, que me interesa mucho :)




-Puf... como aquí en ningún sitio: la gente aún es amable, tiene poco estrés...
-¿Lo qué?
-Por ahí fuera es diferente.
-¿Qué tal?
-Aquí, a por el quinto metro del día.
-¿Cómo no vamos a sentirnos bien aquí? Si aquí están las mejores playas del mundo, si la mejor tortilla del planeta es la de mi madre.
-La de mi madre
-Es la de mi madre
-Somos optimistas por naturaleza: para nosotros todo es "bueno..."
-¿Hace calor?
-Bueno...
-Hace frío...
-Bueno...
-Y la familia, ¿qué tal? ¿Bien?
-Bueno...
-¡Somos positivos! Además los gallegos nunca nos equivocamos.
-Te vas a caer...
-Podemos ir a comer a casa y ver a la familia. Nos gusta tener la despensa y la nevera siempre llenas. Y cuando vemos niños aún les sonreímos y son bien recibidos. Somos los inventores del futbolín, de la pregunta total
-Fran, ¿qué?
-...de la traducción libre y del hand-parking. Come en casa de tus padres siempre que puedas. Y si alguien te pone en apuros, ¡respóndele con otra pregunta! Y si preguntan dónde se juega el mejor fútbol, responde con rotundidad: ¡en Galicia! Tenemos 17340 fiestas, tenemos greleiras, percebeiros, tenemos "orballo" (rocío), "carballo" (roble), lluvia, lluvia y lluvia. Donde la comida es una religión y un domingo sin aldea no es un domingo y donde la gente no es fea, es riquiña. Démonos cuenta de lo bien que vivimos. Gocemos de nuestra forma de vida ¡Vivamos como gallegos!

lunes, 8 de octubre de 2007

Las manos



Pues es completamente cierto que de un par de años a esta parte, esta pobre mortal ha desarrollado una obsesión nerviosa e incontrolable hacia las manos. No es para innovar ni porque esté muy visto eso de que (lo primero) en lo que nos fijamos las chicas es en los ojos, en la silueta o en los rasgos de la cara. La pura y única realidad es que para mí unas manos pueden ser más bonitas que los ojos más verdes o la espalda más espectacular que pueda tener un chico. Así que el mecanismo de observación se pone en marcha en cualquier momento y lugar: caminando por la calle, en el tren, en el urbano yendo hacia la facultad o viendo la tele.

Así que si un día me estais hablando u os estoy hablando y notais que en vez de miraros a la cara no dejo de miraros las manos, no creais que estoy loca, es que no puedo evitarlo xD. Aunque esto solo va por los chavales, porque de momento no me pasa lo mismo con las manos femeninas.

Por cierto, las manos de la foto me gustan especialemente y son de alguien muy conocido así que se aceptan apuestas, a ver quien acierta. Es un actor.

martes, 2 de octubre de 2007

El mal del periodismo

Vaya por delante que todo lo que publico en el blog se basa en mi opinión personal y en las apreciaciones que, según mi propio criterio, creo convenientes. Opiniones que, por otra parte, son tan respetables como cualquiera, supongo.

Pues bien, el sábado por la noche vi el programa La Noria de Telecinco. Como ya sabréis, se emitió un reportaje en el que se barajaba la posibilidad de que Antonio Puerta hubiera podido sobrevivir si se hubieran dado una serie de supuestos que en realidad no ocurrieron. El programa expuso la información que había obtenido de su investigación, según la cual, en el estadio no había los efectivos sanitarios necesarios para atender al jugador y no fue atendido por personal cualificado.

Puedo decir que sentí vergüenza al escuchar alguna de las partes del reportaje. Me parece indignante que se siga hurgando en el tema simplemente porque las televisiones saben que, después del gran jaleo que se produjo alrededor de la muerte del futbolista, el tema les va a dar audiencia. Para mí eso no es periodismo, y lo dice una persona que desde los doce años ha querido estudiar esa carrera. Creo que eso son simplemente ganas de tocar las narices. No creo que sea necesario decir que alguien "podría estar vivo si..." primero por repeto a la familia, que probablemente no vea con muy buenos ojos que se especule con la posibilidad de que un ser querido que han perdido pudiera estar vivo si no fuera por tal o cual cosa, y segundo porque no veo qué beneficio sacan aquellos que realizan estos reportajes y vierten ciertas opiniones. Sí, audiencia, vale. ¿Y es posible olvidarse de la ética y la conciencia para conseguir espectadores?
Aunque claro está que quizás lo que a mí me resulta deplorable vergonzoso, para otros está dentro de lo común y corriente o, incluso, necesario.

Era la primera vez que lo veía y la verdad es que sigo sin entender cómo los programa del estilo de este pueden tener tantísima audiencia. Será que el morbo es lo que vende. A mí me parece realmente preocupante.